El calor es uno de los efectos más significativos para el concreto. ¿Por qué?, un aumento de temperatura puede descontrolar la hidratación que el agua provee al concreto, ya que la velocidad del agua sobre la superficie de concreto varía, trayendo efectos tales en la durabilidad y resistencia, una vez que se endurece este material este efecto se ve comúnmente reflejado en el agrietamiento, aunque cabe aclarar que no es la única razón que provoque este efecto, sin embargo, si es una de las posibles causas.

También se debe considerar que las cimentaciones de concreto expuestas a la luz solar directa experimentan cambios de temperatura en comparación a estructuras techadas.

Otro aspecto que debe considerarse de la temperatura es que pueden surgir problemas en el acabado si el concreto es colocado cuando existe mucho calor en el ambiente. En estos casos el concreto tiende a secarse muy rápido y si el clima empeora hará costras conforme el secado de la superficie. Para los pisos de concreto, dichas costras crean una superficie irregular.

¿Cómo reducir la posibilidad de agrietamiento de concreto?

Si bien ya expusimos varias causas por las cuales no es recomendable colar a altas temperaturas, aquí expondremos formas de ayudar a una mejor integración y secado del concreto.

Podemos tomar en cuenta el porqué es regular que cuele en las primeras horas de la mañana, ya que el clima se presta para que pueda secarse de forma regular teniendo mejores resultados.